Así que si te congelas mañana, ojalá tengas suerte y vuelvas.
Nosotros vimos cómo se cerraban tus ojos, sí, nosotros vimos cómo se cerraban tus ojos.
Ojalá y te congeles mañana, para que los pocos recuerdos que tengo de ti se mantengan intactos y tu no puedas mencionar ni una sola palabra.
Que permanezcas dormida, así sonriente con tus manos sobre tu abdomen, aparentando esa inocencia que quiero mejor no olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario